Nadie es
perfecto. Nada lo es.
La vida no
es más que un montón de cabos
sueltos y
las personas somos seres imperfectos
jugando a
que todo está bien. Aunque, por otra
parte, tal
vez estas imperfecciones se hayan
convertido
precisamente en nuestra esencia
y sean, a
su vez, la vida misma.
LA
PLAYA DE LOS PRECIOS
POR
BRUNO NOMTANO.
No hay comentarios:
Publicar un comentario